Este aumento en la industria turística dominicana se debe a la nueva Ley de Incentivos de Turismo que ha permitido que 34 proyectos turísticos, de todo el territorio nacional, cuenten con una inversión de 2.300 millones de dólares y salgan hacia delante. 

La nueva legislación ha ampliado de 10 a 15 años el periodo de exención fiscal, fomentando todos los establecimientos existentes. Así, la mayoría de los hoteles de Punta Cana se han modernizado. 

La recepción de viajeros también ha crecido, sobre todo en el mercado británico y alemán, que han mostrado una recuperación respecto el pasado año, gracias a la labor de promoción que se ha realizado desde el Ministerio de Turismo. Además, los turistas norteamericanos han aumentado un 10 por ciento. Tras haber conseguido 10 millones de viajeros, las llegadas de pasajeros por el Aeropuerto Internacional de Punta Cana se han incrementado en un 13 por ciento con relación a los tres primeros meses del 2013, lo que augura una buena temporada para el turismo. 

En el caso de la provincia de Puerto Plata, se espera que con la nueva terminal de cruceros de Carnival, que se terminara de construir en diciembre de este año, se dinamice el turismo en la Costa Norte del país. Además, desde el Ministerio también se han reforzado otras áreas con la nueva Zona Colonial, la construcción de la autovía El Coral y el innovador Boulervard del Atlántico. 

"Mientras que el crecimiento de la industria turística dominicana ha registrado un aumento de un 3,6 por ciento, la región del Caribe en general sólo ha crecido un 1 por ciento", ha comentado el ministro de Turismo, Radhamés Martínez Aponte. 

El ministro de turismo también ha señalado que este año contemplan la posibilidad de construir obras de infraestructuras en Baní, en Peravia, y Montecristi y que están realizando un nuevo Plan de Ordenamiento Turístico, con el fin de mejorar el producto turístico dominicano.

Además, el país también quiere hacerse un hueco en el importante turismo de negocios y de reuniones. Así, para fomentarlo se construirá un Palacio de Convenciones en Santo Domingo, en el que participará el sector hotelero privado.